La presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Las Palmas, Rita Mendoza, se reunió con el consejero de Sanidad, Blas Trujillo, para ofrecerle el apoyo de su colectivo profesional de cara a un nuevo enfoque del sistema sanitario que permita atender las nuevas necesidades de salud de la población.
El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Blas Trujillo, se reunió este lunes con la presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Las Palmas (CELP), Rita Mendoza, con el fin de conocer de primera mano las propuestas planteadas por las enfermeras canarias para la mejora del sistema sanitario. La reunión se produce una semana después de la comparecencia ante la Comisión de Sanidad del Parlamento de Canarias, en la que la presidenta del CELP reclamó un nuevo enfoque que haga evolucionar al Servicio Canario de Salud hacia una mejor atención de las nuevas necesidades de salud de la población.
Mendoza explicó al consejero el nuevo escenario al que se están enfrentando los profesionales de la salud en el contexto de la sociedad actual: mayor cronicidad de las enfermedades, más dependencia y más soledad. En opinión de las enfermeras, para dar respuesta a esta nueva realidad se requiere un cambio de perspectiva a todos los niveles, que vuelque los esfuerzos de la sanidad pública hacia más y mejores cuidados profesionales de salud.
En esta necesaria transformación del sistema sanitario el CELP considera imprescindible reforzar el papel de la profesión enfermera, su liderazgo y participación activa. Un cambio que el Colegio propone sea promovido en el seno del Gobierno de Canarias por una nueva Dirección General de Cuidados, similar a la que ya existe en otras comunidades como Asturias o Andalucía. Se trataría de un departamento desde el que garantizar los recursos suficientes para ofrecer cuidados al segmento cada vez más numeroso de población afectada por alguna de estas situaciones socio sanitarias: cronicidad, dependencia o soledad no deseada.
En Canarias existen en la actualidad unas 14.400 profesionales de enfermería en activo. Se espera que la cifra aumente un 18% en los próximos 10 años, lo que desde el Colegio profesional se entiende como una oportunidad para mejorar las prestaciones del Servicio Canario de la Salud. El CELP advierte que hay que trabajar para captar y retener a las nuevas enfermeras, muy demandadas por su elevada formación y capacitación en otras comunidades autónomas y en otros países europeos, como Alemania o el Reino Unido.
En la reunión con el consejero, Rita Mendoza insistió en la necesidad de acabar con el techo de cristal que todavía hoy frena el desarrollo profesional de este colectivo. Como ejemplo, la presidenta de las enfermeras de Gran Canaria, Fuerteventura, Lanzarote y La Graciosa expresó su malestar por la formación de la recién constituida Comisión de Garantía y Evaluación para la aplicación de la Ley de Eutanasia en Canarias, en donde las enfermeras apenas cuentan con 2 de los 13 componentes, frente a 6 médicos y 5 asesores jurídicos. Mendoza recalcó al consejero que si la sanidad canaria sigue infravalorando a sus enfermeras le será imposible retener el talento, que acabará emigrando a otros territorios en donde es más apreciado.